Thursday March 28,2024
Iniciar pagina principal Quienes somos y que hacemos Mision principal del sitio en internet Como rezar el santo rosario, oraciones, etc. Base de datos de documentos recopilados Servicio de asesoria via e-mail. Calendario de eventos en el bimestre Personas para establecer contacto
 
San José - El mas santo de los antos

  


SAN JOSÉ
El más santo de los santos
  


Introducción

1»  Algunos textos aplicables a san José

2»  Virginidad de san José

3»  Matrimonio de José y María

4»  Paternidad de san José

5»  La sagrada familia

6»  Un poco de historia

7»  Privilegios de san José

8»  Asunción de san José

9»  San José y los moribundos

10»  El más santo de los santos

11»  Los Papas y san José


12.1»  Apariciones de san José Parte 1

12.2»  Apariciones de san José Parte 2

12.3»  Apariciones de san José Parte 3

12.4»  Apariciones de san José Parte 4


13.1»  Milagros de san José Parte 1

13.2»  Milagros de san José Parte 2

13.3»  Milagros de san José Parte 3

13.4»  Milagros de san José Parte 4


14.1»  Palabras de algunos santos - Parte 1

14.2»  Palabras de algunos santos - Parte 2

14.3»  Palabras de algunos santos - Parte 3

14.4»  Palabras de algunos santos - Parte 4


15»  Algunos santuarios de san José

16»  Reflexiones

17»  Dolores y gozos de san José

18»  Letanías a san José

19»  Oraciones a san José

20»  Consagración a san José

21»  Conclusión

22»  Bibliografía

23»  Novena a san José
(versión corta)

 

9» San José y los moribundos

Autor: P. Angel Peña O.A.R

Dice la palabra de Dios: Mucho vale a los ojos de Dios la muerte de los que le aman (Sal 116, 15). Bienaventurados los que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, para que descansen de sus trabajos, pues sus obras los acompañan (Ap 14, 13).

La muerte es una de las realidades más ciertas y más trágicas de la existencia humana. Todos, tarde o temprano, debemos morir. Pero ¡qué diferencia entre morir desesperados o morir en paz con Dios! San José tuvo la suerte de morir entre los brazos de Jesús y de María. Su muerte fue un paso tranquilo a la eternidad. Veamos lo que nos dice al respecto la beata Ana Catalina Emmerick:

Cuando José murió, estaba María sentada a la cabecera de la cama y lo tenía en brazos, mientras Jesús estaba junto a su pecho. Vi el aposento lleno de resplandor y de ángeles. José, cruzadas las manos en el pecho, fue envuelto de lienzos blancos, colocado en un cajón estrecho y depositado en la hermosa caverna sepulcral, que un buen hombre le había regalado. Fuera de Jesús y María, unas pocas personas acompañaron el ataúd, que vi, en cambio, entre resplandores y ángeles34.

La venerable María de Jesús de Ágreda dice: Jesús le dio la bendición y le dijo: Padre mío, descansa en paz y en la gracia de mi Padre celestial y mía. A mis profetas y santos, que te esperan en el limbo, dales alegres nuevas de que llega ya su redención. En los brazos de Jesús expiró el santo y felicísimo José, y Jesús le cerró los ojos. Y, al mismo tiempo, una multitud de ángeles, que asistían con su Rey y Reina, hicieron dulces cánticos de alabanza con voces celestiales y sonoras. Luego, llevaron su alma al limbo de padres y profetas..., donde causó nueva alegría ante aquella innumerable redención35.

El pueblo cristiano, basándose en la dicha de José de haber muerto en los brazos de Jesús y de María, lo ha considerado siempre como abogado y protector de los agonizantes. Y así lo ha corroborado la Iglesia con su autoridad. El Papa Benedicto XV, el 25 de julio de 1920, escribió: Habiendo la Sede apostólica aprobado diversos modos de honrar al santo patriarca, celébrense con toda la solemnidad posible los miércoles y el mes que le está dedicado (marzo), en todas y cada una de las diócesis a instancia de los obispos. Pero, principalmente, como es singular protector de los moribundos, pues a su muerte estuvieron presentes el mismo Jesús y María, fomenten los venerables hermanos aquellas asociaciones piadosas, que fueron fundadas para orar a san José por los moribundos como la de la “Buena muerte” y la del “Tránsito de san José”, a fin de que ayude con toda su autoridad a favor de los agonizantes.

El Papa Pío XI, en las letanías de san José, aprobadas el 21 de marzo de 1935 dice: Patrono de los moribundos, ruega por nosotros. En el Catecismo de la Iglesia católica se nos aconseja: Pedir a la Madre de Dios que interceda por nosotros en la hora de nuestra muerte y confiarnos a san José, patrono de la buena muerte (Cat 1014).

Veamos un ejemplo: La venerable Ana de San Agustín (1555-1624), carmelita descalza, era muy devota de san José y estando ya agonizante, vinieron a llevársela al cielo Jesús, san José y santa Teresa de Jesús. Viendo la moribunda su celda convertida en un cielo, dio muestras de alegría extraordinaria. En cierto momento, exclamó tres veces: ¡Mis padres! Refiriéndose a san José y santa Teresa... Una carmelita de gran virtud, que moraba en distinto convento, estando rogando por la enferma, la vio subir al cielo entre san José y santa Teresa de Jesús, seguida de gran número de ángeles y santos, que componían el triunfal cortejo. Así honra san José en la hora de la muerte a los que le honran en vida y le piden la gracia de una buena muerte36.

San Vicente Ferrer (1350-1419), predicando un día el sermón de la fiesta de la Navidad, contó lo siguiente: Un mercader de Valencia (España) invitaba a su casa todos los años el día de Navidad a un pobre anciano y a una mujer con su hijo pequeño, pues le representaban a la Virgen con el niño Jesús y san José. Se sabe que, a su muerte, se le aparecieron la Virgen con el Niño y José diciéndole: Por recibirnos en tu casa, te recibiremos a ti en la nuestra37.


34 Emmercik Ana Catalina, Visiones y Revelaciones, Ed. Guadalupe, México, Vida de Jesucristo, cap. XCV, p. 330.
35 Mística ciudad de Dios, Tomo 5, segunda parte, libro 5, cap. 15.
36 Resumen del ejemplo del libro Glorias de san José de Francisco Butiñá, o.c., pp. 613-614.
37 Llamera Bonifacio, Teología de san José, BAC, Madrid, 1953, p. 652.

 

 

   


[Inicio] [ Blog] [Mision] [El Rosario] [Documentos] [Asesorias] [ Política de Privacidad] [Contacto ]

Copyright © 2022 Maria Luz Divina