Padre Nuestro Señor Dios del Universo
Padre nuestro, señor y Dios del universo, tu nombre sea glorificado para siempre.
Por amor a nosotros haz descendido del cielo, en la figura del hijo amado.
Nos haz enseñado el camino, la verdad y la vida plena.
Haz pagado con tu sangre el precio por mis pecados.
Haz abierto las puertas del cielo para nosotros los pecadores.
Hoy vengo a ti señor Jesús, para darte gracias por ser mi salvador y señor.
En este día me consagro a ti, en cuerpo, alma y espíritu.
Ayúdame a decir no, a toda mala tentación, y a decir sí, a todo lo que te agrada.
Ruego que tu sangre cubra y proteja a mi familia y a mi persona de todo ataque del maligno.
Con la fuerza del Espíritu Santo cumpliré con mis obligaciones de este día, y con tu gracia seré feliz, haciendo el esfuerzo de vivir en tu amor.