134- Apareceré aún a pequeñas y humildes criaturas
Soy tu Mamá Celestial, tú me invocas y Yo voy a ti.(1)
Tú hablas de Mí a los hermanos, los llevas por mis senderos, gracias entonces por esto, conozco tu amor, que como una rosa perfumada llega a Mí y Yo la tomo. Me muestro a los pequeños, hablo a los más humildes. Así como Dios hizo en Mí lo más grande, fui el primer cáliz, así hace Él en los más pequeños y en los humildes. Jesús se sirve de vosotros, pequeñas luces del mundo, para dar luz al mundo, para extender el amor y para dar esperanza.
"¿Qué te ha dicho la bella Señora?"
La pequeña Bernardita, interrogada, estaba llena de temor: "Sin embargo, yo la he visto, y me ha hablado..." ¡La pequeña y humilde Bernardita! En su camino terrenal encontró muchas espinas, ahora vive en la gloria.
"Yo soy la Inmaculada Concepción..."
A ella se lo dije, para confirmar aquel dogma y para que creyeran en ella. Apareceré aún a humildes y pequeñas criaturas, y los grandes y los soberbios quedarán entonces confusos.
Y contigo, sobre tu camino vendré a tomarte de la mano, cuando traigas a los hermanos a Mí.
13 de Junio de 1983.