49- Cuanto más amor se da, más amor se recibe
"¡Ave, María!
¡Tu gracia ilumina el mundo y el mundo obtiene luz de tu maternal e infinito amor!"
¡Hijos Míos!
Un Ángel os ha hablado y Yo, Vuestra Mamá, desde e Cielo sigo rezando por el mundo. Vosotros rezad Conmigo, trabajando, dando, obrando en el bien y pensando en Jesús. Cuanto más amor se da, más amor se recibe después.
En el tiempo se lo siente: y ésta es la fuerza de las almas: ¡sentir en sí mismas la voz de Dios en el alma y en la conciencia, en el corazón y en la propia vida! Y la vida terrenal es un camino florido, si es vivido en el amor a Jesús.
En aquel tiempo muchas veces Mi Hijo me hablaba de la humanidad:
"Immi, vendrán hombres y hombres a la tierra: ¡y muchos me amarán y te amarán!"
"¡Hijo Mío, no será en vano entonces lo que un día sufrirás por ellos!"
Era como si vosotros estuvieseis con Nosotros, en nuestro pequeño jardín: Mi Hijo, como Dios, os veía a todos, y os mostraba a Mí.
¡Y Yo desde entonces ya os amaba con infinito amor!
20 de Mayo de 1981, 24 horas.