Capítulo 3:
Errores más frecuentes
sobre las indulgencias:
-Una indulgencia acortará el tiempo en el purgatorio en un número fijo de días-
El número de días que solía asociarse con las indulgencias era una referencia al período de penitencia que uno podría realizar durante la vida terrena.
Se desconoce lo duradero que puede ser el purgatorio para cada persona concreta.
Hasta el Concilio Vaticano II se decía que cada indulgencia remitía un cierto número de "días" de la disciplina de una persona -por ejemplo, un acto podía ganar "300 días de indulgencia"- pero el uso del término "días" confundía a la gente, dándoles la impresión errónea de que en el purgatorio sigue existiendo el tiempo y de que podemos calcular nuestro "tiempo de descuento" en una manera matemática.
El número de días asociado con las indulgencias realmente nunca significó que esa cantidad de "tiempo" fuera descontada de la estancia que le correspondiera a alguien en el purgatorio.
En lugar de ello, significaba que se concedería un monto de remisión indefinido pero parcial, proporcionado a lo que los antiguos cristianos hubieran recibido llevando a cabo obras piadosas durante esa cantidad de días.
Para solucionar esta confusión, Pablo VI emitió una revisión del Enchiridion o manual de indulgencias.
Hoy ya no se asocian cantidades de días con las indulgencias, que pueden ser plenarias o parciales.
Sólo Dios sabe exactamente lo eficaz que es una indulgencia parcial o si se ha recibido de hecho una indulgencia plenaria.