Capítulo I
A orillas del Jordán (81 - 99)
Autor: Catalina Rivas | Fuente: www.LoveAndMercy.org
81) Pero también hay cristianos que se confiesan,
que van a Misa, y que tratan de introducirme en la
ciudad al estilo de un caudillo, como un "Che
Guevara", como el líder aquel cuyos ojos están
chispeando de arrogancia. También hay quienes
dicen constantemente: Jesús dice tal cosa, o Jesús
hizo esto, pero no hacen lo que Yo digo...
82) Por eso fue que pregunté a Mis discípulos: 'Y
ustedes, quién dicen que Soy Yo…' (Lc 9,18)."
83) En ese momento el Señor me mostró cuando
sentado, comiendo entre Sus Apóstoles cerca de la
ciudad de Cesarea de Filipo, les preguntó esto de
golpe, en medio de la conversación acerca de lo que
se decía de Él en el pueblo... "Y ustedes, quién dicen que
Soy Yo…" (Lc 9,20) Hubo un silencio, dejaron de
comer. Jesús los mira a todos con una mirada que
parece mezcla de ternura, con una sonrisa y cierta
picardía. Por supuesto que Él sabía lo que iba a
suceder, pero el instante era muy importante...
84) Al respecto me dice el Señor:
85) "El momento era importante porque un hombre
iba a ser sacudido por el Espíritu Santo. Yo había
venido enseñándoles, hablando con ellos durante
muchas horas, orando con ellos, dejándolos que
sean testigos de tantos milagros y señales. Quería
ver si ellos habían entendido el mensaje, la
enseñanza que quería darles.
86) Algunos pensaron por fracción de segundos: 'si le
digo esto, me va a contestar esto otro...' o '¿será que debo decirle esto?...' En realidad Mi pregunta
los desconcertó… los tomó desprevenidos…
87) Pero ahí el Espíritu Santo se reveló a través de
Pedro y dijo: 'Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios
vivo.' (Mt 16,16).
88) Tanto el testimonio de Pedro como Mi posterior
respuesta, dejaron atónitos a los demás Apóstoles.
Para ellos, aún Yo era el Mesías que Dios había
enviado para liberar a Israel del yugo de los
romanos y fundar Su nuevo Reino en la tierra. Ni
siquiera Pedro llegó a comprender la magnitud de lo
que significó la revelación de Mi Padre, por eso les
pedí que no lo comentaran con nadie hasta que
llegara la hora de Mi glorificación.
89) Aún hoy pregunto a los hombres: 'Y ustedes, ¿quien dicen que Soy Yo?'… ¿Quién soy para cada
hombre que se dice 'cristiano practicante' o
persona 'convertida'…?"
90) Y es verdad, hermanos queridos, aún hoy Jesús te
pregunta y me pregunta: "¿Y tú, quién dices que Soy
Yo?" O sea, "¿qué lugar ocupo en tu vida, por quién Me
tienes en tu vida de cada día?"
91)¿Saben una cosa? A Jesús no le importa si sabemos
o no quién fue Simón Bolívar, o Benito Juárez, o Jean
Paul Sartre, o cualquier otro personaje famoso, ni
siquiera los Doctores de nuestra Iglesia (a quienes
deberíamos al menos haber oído nombrar); o qué dijo
Ernesto Sábato o Lenin… A Jesús le importa nuestra
respuesta personal frente a estas grandes preguntas: ¿Quien Soy Yo para ti?, ¿qué significo para ti?
92) Así como cuando Jesús sería llevado ante Pilato y éste le diría: "¿Eres tú el Rey de los judíos?" Jesús lebcontestó: "¿Viene de ti esa pregunta o repites lo que te han
dicho otros de mí?" (Jn 18, 33-34), de la misma manera,
cuando nosotros le decimos: "Tú eres el Señor, Tú eres Dios, Tú eres el Hijo de Dios", Jesús nos
pregunta: "¿Eso lo dices tú, o es porque lo has
escuchado?
93)¿Es porque tu corazón Me reconoce o porque lo
oíste en la Iglesia o en tu familia, o en tu apostolado,
entre tus amigos, etcétera? ¿Es producto de lo que te
dicen o es lo que tienes en tu corazón…?"
94) Recordemos que un día Jesús dijo, "En verdad, en verdad
te digo que a menos que uno nazca de agua y del Espíritu,
no puede entrar en el reino de Dios" (Juan 3:5).
95)¿Que significa aquí "nacer de nuevo"? Nacer de
nuevo no es únicamente abandonar la vida pecadora
y empezar una vida nueva, después de creer en Jesús,
como piensa la mayoría de la gente... aunque tampoco
la mayoría lo haga.
96) No cabe duda que todo esto es bueno, pero esto no
es todo lo que quiere decirnos. Sumergirse en el agua,
o "hablar en lenguas" no es nacer de nuevo y estar ya
salvados, como lo manifiestan algunos grupos de
otras religiones o sectas.
97) "Nacer de nuevo" significa que debemos
arrepentirnos de nuestros pecados, creer en el
Bautismo del Señor y en el poder de la Sangre de
Jesús, derramada en la Cruz, para recibir Su perdón
en nuestros corazones y empezar a transitar el camino
de los justos.
98) Este no es un cambio que viene de los seres
humanos, sino que es una transformación que viene
de Dios.
99) En la Primera Carta de Juan 5,6-8, la Biblia dice, "Él
es el que viene por el agua y la sangre: Jesucristo y no sólo
por el agua, sino por el agua y la sangre; y el Espíritu
también da su testimonio, el Espíritu que es la verdad."