1.14» Jesús es Sentenciado a Muerte
Autor: Catalina Rivas | Fuente: www.LoveAndMercy.org
l) Al amanecer, Caifás ordenó que Me condujeran a
Pilatos para que pronunciara la sentencia de muerte.
Este Me interrogó, deseoso de hallar un motivo para
condenarme pero, al mismo tiempo, su conciencia lo
atormentaba y sentía gran temor ante la injusticia que iba
a cometer. Al fin, encontró un medio para desentenderse
de Mí y mandó que Me llevaran a Herodes.
2) En Pilatos están fielmente representadas las almas que,
sintiendo al mismo tiempo el movimiento de la gracia y
de sus pasiones, dominadas por el respeto humano y
cegadas por el amor propio, por el temor de parecer
ridículas, dejan pasar la gracia.
3) A todas las preguntas de Pilatos, nada respondí. Mas
cuando Me dijo: ¿Eres tú el Rey de los Judíos?
Entonces, con gravedad y ente-reza, respondí: Tú lo has
dicho, Yo Soy el Rey; pero Mi reino no es de este
mundo... Con estas palabras quise enseñar a muchas
almas cómo, cuando se presenta la ocasión de soportar el
sufrimiento, o una humillación que podrían fácilmente
evitar, deben contestar con generosidad: Mi reino no es
de este mundo, es decir, no busco las alabanzas de los
hombres; Mi Patria no es esta, ya descansaré en la que lo
es verdaderamente. Ahora, ánimo para cumplir mi deber
sin tener en cuenta la opinión del mundo. Lo que me
importa no es su estima, sino seguir la voz de la gracia,
ahogando los reclamos de la naturaleza. Si no soy capaz
de vencer solo, pediré fuerza y consejo pues, en muchas
ocasiones, las pasiones y excesivo amor propio ciegan el
alma y la impulsan a obrar el mal.
4) No son ni 10 ni 20 los verdugos que destrozan Mi
Cuerpo; son muchísimas las manos que lastiman Mi
Cuerpo, recibiendo la comunión en la mano— el trabajo
sacrílego de Satanás.
5) ¿Cómo pueden contemplarme en este mar de dolor y
de amargura, sin que su corazón se mueva a compasión?
6) Pero, no son los verdugos los que han de consolar sino
ustedes, almas escogidas, para que alivien Mi dolor.
Contemplen Mis heridas y vean si hay alguien que haya
sufrido tanto como Yo, para demostrarles su amor.